Un dirigente municipal de la capital iraní, Teherán, ha hecho un inusual reconocimiento de la corrupción masiva de los trabajadores municipales en todo el país, calificándola de epidemia.

ISNA
En una entrevista con la agencia de noticias estatal iraní ISNA publicada el lunes, el presidente del Consejo Municipal de Teherán, Mohsen Hashemi Rafsanjani, dijo que los municipios cometieron 26.000 delitos de corrupción relacionados con permisos de construcción y zonificación en la capital y en otros lugares en 2016 y 2017. Dijo que el problema se ha extendido tanto que es una epidemia nacional.
Rafsanjani es el hijo mayor del difunto expresidente iraní Ayatolá Akbar Hashemi Rafsanjani. El menor de los Rafsanjani comenzó a ejercer como presidente del Consejo Municipal de Teherán el pasado mes de agosto. Facilitó pocos detalles más sobre los 26.000 casos de corrupción municipal, que según él se produjeron en los dos años anteriores a su toma de posesión. Rafsanjani achacó la corrupción a la falta de fondos de los municipios, que, según dijo, lleva a los trabajadores municipales a buscar sobornos a cambio de conceder permisos de construcción y de zonificación y a ignorar las infracciones del código por parte de los solicitantes.
VOA
En declaraciones al programa NewsHour de la VOA Persa el martes, el destacado economista Fariborz Rais Dana, con sede en Teherán, dijo que la corrupción es un problema nacional crónico que precede a la Revolución Islámica de Irán de 1979.
Pero Rais Dana, miembro de la Asociación de Escritores de Irán -el sindicato de escritores más antiguo y prestigioso del país- dijo que la corrupción empeoró tras la guerra entre Irán e Irak de la década de 1980. «El gobierno iraní decidió dar al sector privado más espacio para crecer con el fin de ayudar a la reconstrucción del país después de la guerra», dijo. «Fue entonces cuando empezamos a ver la aparición de la corrupción del sector privado y público a escala masiva en la sociedad iraní».
Este año, Irán ha sido testigo de frecuentes protestas en todo el país por parte de ciudadanos que expresan su ira contra funcionarios locales y nacionales y líderes empresariales a los que acusan de corrupción, mala gestión y opresión.